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El 12 de diciembre se celebra el Día Mundial de la Disfagia, una enfermedad que afecta a 2 millones de personas en España. Producida por diversas patologías (desde infecciones de garganta o divertículos a cáncer o esclerosis múltiple). Consiste en la dificultad para tragar alimentos sólidos y/o líquidos, suele afectar más a personas mayores y tiene consecuencias negativas para la salud, como deshidratación, desnutrición, infecciones respiratorias o episodios de asfixia.
Desde Dedicae queremos dar visibilidad a esta enfermedad y aportar nuestro grano de arena a la hora de mejorar la calidad de vida de estos pacientes. Aunque este trastorno no tiene cura, los especialistas recurren a tratamientos farmacológicos, logopédicos y/o quirúrgicos que alivian significativamente los síntomas y recomiendan unas pautas de alimentación seguras y eficaces que siempre aplicamos en nuestros cuidados a domicilio.
La mejor posición del cuerpo
La posición en la que se ingieren los alimentos es muy importante para mejorar el estado del paciente. Se aconseja que no esté acostado y se sienta lo más cómodo posible: la postura ideal es de 90 grados, con los pies apoyados en el suelo, el tronco recto y la espalda en contacto con el respaldo de la silla.
En el momento de tragar es recomendable que flexione la cabeza ligeramente hacia delante para estimular el reflejo de la deglución, y no lo haga nunca con la cabeza inclinada hacia atrás ya que esto aumenta el riesgo de que el alimento pase a las vías respiratorias y se produzca un atragantamiento.
Las personas con dificultad para mantener una postura correcta pueden necesitar adaptaciones, como cabezales o vasos especiales, y las que son dependientes, requerir la ayuda de un cuidador que se posicione enfrente y a una altura por debajo de su silla para evitar que trague con la cabeza girada hacia un lado.
En el caso de personas encamadas, siempre hay que incorporarlas para que el cabecero tenga un ángulo de entre 60 y 80 grados, la espalda quede completamente recta y la cabeza permanezca algo inclinada hacia delante con la ayuda de un cojín.
Ambiente tranquilo y algunas precauciones
A la hora de afrontar este problema también es importante mentalizarse de que el momento de comer debe plantearse conscientemente, no como algo reflejo, y que hay que dedicarle tiempo en un ambiente de tranquilidad y concentración.
Conviene evitar que la persona con disfagia coma sola, así como que se distraiga, hable, ría o llore mientras lo hace. Para aumentar su seguridad, también se recomienda escoger un sitio en la mesa que permita moverse fácil y rápidamente en caso de problema; dejarle descansar entre plato y plato si es necesario; comprobar siempre que respira correctamente por la nariz; administrarle la ración en pequeños trocitos; no dejarle llenarse la boca hasta que esté vacía; recordarle la necesidad de comer despacio y masticando lo suficiente…
¿Qué dieta elegir?
Los especialistas siempre nos asesorarán sobre la dieta más adecuada para estos pacientes y los cuidados que debemos proporcionarles para prevenir el riesgo de atragantamiento y/o broncoaspiración de comida que pueden acabar provocando infecciones pulmonares.
Las indicaciones son diferentes si la disfagia es con líquidos o con sólidos. Así, por ejemplo, en el caso de los líquidos, hay que utilizar espesantes para facilitar su ingestión en función del grado y tipo de disfagia: néctar (consistencia ligera), miel (consistencia mediana) o pudding (consistencia gruesa).
También se recomienda recurrir al agua gelificada y evitar postres de gelatina, helados o líquidos con pulpa, como zumos de fruta sin colar u horchata, ya que los residuos pueden quedar retenidos en la garganta, así como leche, café, sopas sin espesar o alimentos que al masticar producen líquidos.
En cuanto a la disfagia con alimentos sólidos se recomiendan ante todo los más fáciles de deglutir -como quesos cremosos y suaves, yogures, tortillas y huevos revueltos, cremas de verduras, carne picada, pescado suave y sin espinas…-, modificar la textura de los que le gustan al paciente para convertirlos en purés o hacerlos más fácilmente masticables, y evitar las galletas, cereales, arroz, verduras y frutas crudas, patatas fritas, carnes y pescados duros, productos fibrosos, frutos secos…
Ten siempre en cuenta
Otras recomendaciones importantes son:
– Los alimentos deben tener texturas uniformes y homogéneas, evitando líquidos y sólidos en un mismo plato, como sopa de fideos, leche con cereales o naranja, que se deben presentar siempre triturados
– Cocinar los alimentos de manera que pierdan las menos propiedades posibles (hervir en agua, por ejemplo, reduce el contenido nutricional de los alimentos)
– Asegurar la ingesta de macronutrientes, vitaminas y minerales ofreciendo una dieta variada
– Potenciar el sabor de los platos mediante especias y hierbas aromáticas, ya que algunas personas tienen una menor percepción del sabor y los sabores intensos estimulan su salivación y la deglución.
¿Y cómo darle las medicinas?
Las medidas generales indicadas para la ingesta de medicamentos son:
– Evitar comprimidos duros o resbaladizos y suspensiones de consistencia líquida
– Excepto si son sublinguales o con cubierta entérica, triturar los comprimidos hasta conseguir un polvo fino y mezclarlos con 10-15 ml. de agua con espesante hasta obtener la viscosidad más segura
– No mezclarlos con la comida para evitar el mal sabor y que no consuma la dosis en caso de no acabar la ración
– Cuando los fármacos son en cápsulas o no se puedan triturar, añadir un poco de yogur o algún producto específico de venta en farmacias
– Los jarabes y soluciones con una viscosidad inferior a la que se necesita se pueden diluir en 10-15 ml de agua y tomarse añadiendo espesante
Fuentes:
Recomendaciones nutricionales de la Fundación Española del Aparato Digestivo
Guía de Disfagia de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria https://semergen.es/files/docs/grupos/digestivo/manejo-disfagia-ap.pdf
Dieta de fácil deglución de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición
Servicios Dedicae:
Cuidados de personas mayores a domicilio en Madrid
