¿Necesitas información de nuestros servicios? Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo
Una quemadura es una lesión en la piel o en los tejidos del cuerpo causada por el contacto con el calor, la electricidad, la radiación, los productos químicos u otros agentes. La gravedad de la quemadura depende del tipo de agente causante, la duración del contacto y la profundidad de la lesión en la piel o los tejidos subyacentes.
Las quemaduras pueden ser muy dolorosas y pueden afectar la apariencia, la función y la movilidad de la piel y los tejidos afectados. Además, las quemaduras graves pueden ser potencialmente mortales debido a la pérdida de fluidos, la infección y otros efectos secundarios. Es importante tratar las quemaduras adecuadamente para prevenir complicaciones y promover la curación adecuada de la piel y los tejidos afectados.
Los 3 tipos de quemaduras
Pero antes de tratar la quemadura es importante conocer los 3 tipos de quemaduras que existen ya que el tratamiento y el protocolo a seguir son diferentes en un caso u en otro. En este vídeo de nuestro canal, la enfermera Julia Rioja nos explica las diferencias:
Quemaduras de Primer Grado
Afectan solo la capa más externa de la piel (epidermis). Se caracterizan por enrojecimiento, dolor y sensibilidad en la zona afectada. Ejemplos comunes incluyen quemaduras solares leves o quemaduras por contacto breve con objetos calientes.
Quemaduras de Segundo Grado
Afectan tanto la epidermis como la capa subyacente de la piel (dermis). Pueden producir ampollas, enrojecimiento intenso, dolor y sensibilidad. Estas quemaduras pueden requerir tratamiento médico dependiendo de su tamaño y ubicación en el cuerpo.
Quemaduras de Tercer Grado
Son las más graves y afectan todas las capas de la piel, así como los tejidos debajo de la piel. La piel puede aparecer carbonizada o blanca, seca y sin sensibilidad. Las quemaduras de tercer grado pueden requerir tratamiento de emergencia y pueden dejar cicatrices permanentes, así como afectar la movilidad y la función de los tejidos afectados.
Consejos básicos y pasos a seguir ante una quemadura
Una vez que conocemos los tres tipos de quemaduras la siguiente pregunta es, ¿qué hacer ante una quemadura? En este vídeo, la enfermera de Dedicae Julia Rioja nos lo explica:
- Lo primero que hay que hacer ante cualquier quemadura es ENFRIARLA. La piel tiene varias capas y el calor pasa de unas a otras. Si conseguimos frenar la progresión del calor conseguiremos frenar la progresión de la quemadura. Los primeros 15 minutos son los más importantes y lo que haremos será solo enfriarla.
- Se enfría con agua fresca y nunca con hielo porque puede lesionar aún más el tejido. Tampoco debe frotarse porque puede empeorar las ampollas.
- Hay que intentar que la quemadura esté al aire el mayor tiempo posible para que se refresque bien. Si al intentar retirar la ropa se nota cierta resistencia no se debe seguir, lo que hay que hacer es recortar toda la ropa posible alrededor de la herida y seguir enfriando.
- Si la quemadura es suficientemente grave como para ir al hospital (grado II y III) no se debe llevar al aire, hay que taparla con una gasa estéril (y siempre mojada). Si no tenemos gasa pondremos una camiseta o una tela limpia sobre ella (de nuevo mojada).
- De nuevo si tenemos que ir al hospital no se debe poner ningún ungüento, ni cremas ni mantequillas, ya que lo primero que se hace en el hospital es retirarlas y produce mucho dolor.
- Si la quemadura se produce en las plantas de los pies o las manos, o en los genitales, es imprescindible obtener atención médica.
- Al ir al hospital, además de cubrir la herida, es importante abrigar al paciente aunque parezca contraintuitivo. De esta manera combatiremos uno de los principales riesgos de las quemaduras que es la hipotermia del paciente.